martes, 29 de octubre de 2013

Miremos a D. Miguel Rúa

El 29 de octubre de 1972 fue beatificado Don Miguel Rúa, y yo hoy me he parado a pensar qué hubiera sido de la familia salesiana sin él, "el rey de la bondad", continuador como lo fue de la obra de Don Bosco.
Don Bosco lo supo, quizá nada más verlo, y por eso no le daría una medalla, sino la mitad de lo que tenía, "a medias en todo".

Miguel encontró en Don Bosco a un padre, Don Bosco en Miguel a su perfecto sucesor.
"Si Dios me dijera: hágame la lista de las mejores cualidades que desea para sus religiosos, yo no sé qué cualidades me atrevería a decir, que ya no las tenga el Padre Miguel Rúa".



A Don Bosco no se le escapaba nada, ni nadie... y yo pienso en cuántos jóvenes en nuestras casas pasan desapercibidos, cuántos "Miguel Rúa" pasan por nuestra pastoral y no les dedicamos el tiempo suficiente, porque no son los más populares, ni los más atrevidos, ni los que tienen más capacidades para el estudio o el arte o el deporte, son sencillos como lo sería Miguel.
Don Bosco le dedicó mucho tiempo, cariño, le enseñó, le formó, y seguro que no fue tarea fácil, tenemos tanto que aprender de ti Padre, Maestro, Amigo...

No se equivocó, Miguel Rúa, ese chico huérfano de Turín, continuó fiel la obra salesiana a la muerte de su Maestro, y contribuyó en buena parte a que se extendiera por todo el mundo, de manera que a su muerte la presencia salesiana estaba consolidada en buena parte de Europa y Latinoamérica, también en África y Asia. Dios hace milagros en lo más pequeño.
Y yo rezaré esta noche, para ser capaz de entender a nuestros jóvenes, a amarlos, a enseñarles, a darles amor.

Gracias Padre por tantos ejemplos de santidad.

http://blogs.21rs.es/vivirdeotramanera/2013/10/29/miguel-rua-fue-el-cauce/
http://www.corazones.org/santos/miguel_rua.htm

No hay comentarios:

Publicar un comentario